Hola escritores, hoy los dejo con Stefania Gil, ella realizó esta entrada contando su experiencia sobre tener un blog de escritor. Tiene información muy valiosa.
Al iniciarte como escritor, independiente o no, crees que la única tarea que tienes asignada es: escribir libros; pero en esta época en donde las Redes Sociales, las webs y los blogs tienen tanta importancia para una marca, no se puede obviar construir una buena plataforma de escritor que incluya, en muchas ocasiones, un blog de escritor.
Muchos que opinan que la plataforma de autor se trata solo de la página web y no, en realidad es el conjunto de Redes Sociales en los que se «mueve» el autor.
En mis inicios, mi plataforma de autor solo constaba de Twitter, Facebook y Blogger.
A los escritores nos gusta escribir y es por ello que quizá nos parezca atractivo tener una web y además un blog, en el que podamos expresarnos sobre lo que queramos sin tener en cuenta que esto es un grave error de principiantes.
Lo primero a entender es que: Una web y un blog de escritor son dos cosas totalmente diferentes aunque se parezcan entre sí.
La página web, aunque hoy en día tiende a integrarse con el blog, siempre va a estar hecha de modo informativo.
Como la tarjeta de presentación de un autor.
Los datos varían muy poco y las actualizaciones se realizan cuando realmente lo ameritan: nueva publicación, evento, firma de libro.
Mientras que, un blog, aunque puede llevar un menú y algunas páginas extras como «imitando» una página web, es un diario en el que puedes escribir lo que quieras cuando quieras.
“A mi parecer, los blogs son más interactivos”.
Entonces, lo primero es definir si quieres una web, un blog o una web con blog integrado.
Si decides que, integrado o no, lo que tú quieres es un blog, pues entonces te recomiendo preguntarte estas cosas que son muy importantes:
¿Qué quieres publicar en tu blog de escritor?
¿Qué deseas lograr con ese blog?
Yo quería crear un nexo con mis lectores, pero no sabía cómo hacerlo porque publicar las entrevistas que me hacían, promociones de mis libros y las reseñas que hacían de mis libros no me estaba funcionado.
Yo quería una interacción completa con mi blog de escritor.
Fue entonces cuando decidí tener una página web como mi tarjeta de presentación con noticias de mis libros, puntos de venta, biografía, lo básico de una web de autor y en tanto pensaba:
«¿Qué voy a hacer con el blog?»
Un buen día, con todo el cambio que implica ser madre y el tiempo que parece esfumarse, me llegó de la nada la idea de reactivar mi blog con mis experiencias como autora.
Y lo hice escribiendo un post en el que hablaba sobre el escaso tiempo que tenía para escribir por aquellos días.
Desde ese post, tuve claro que mis lectores serían únicamente escritores y me sentí súper a gusto con esa idea.
Así fue pasando el tiempo y yo seguí escribiendo cosas que, según mi experiencia, compartía con otros escritores, pero pronto sufrí un punto de desmotivación porque me di cuenta de que, aunque me encanta compartir experiencias de oficio con mis colegas, yo lo que quiero es ganar lectores.
Como dirían por ahí: me quemé; y decidí parar por completo el blog.
Replantearme todo y pensar muy bien en este punto de mi carrera:
¿Qué he logrado con esto y qué quiero alcanzar en el futuro?
La respuesta no tardó en llegar porque obviamente yo lo que quiero es ganar lectores. Engancharlos, generar contenido interesante y romántico para ellos.
Pero eso no se logra de la noche a la mañana porque hoy en día, un blog, requiere más lógica que palabras bonitas para escribir.
SEO, análisis de Google, contenido enlazado y muchas otras cosas que llevarán tu blog de escritor al éxito o no.
Siempre digo que cuando uno está en el camino correcto todo se va alineando y fíjate si será verdad que en cuanto me empezaron las ganas de reactivarme con todo lo del blog, pero enfocado a mis lectores, apareció Kassfinol quien tiene aquí en su web un montón de información útil en cuanto a esto y que deberías seguir si quieres aprender de marketing para escritores y demás.
Después de conversarlo con ella y que me enseñara sobre SEO y sobre generar contenido valioso, me di cuenta de todo lo que estuve haciendo mal con el blog por el simple hecho de dirigirlo al nicho equivocado.
Mi nicho no son los escritores.
Son los lectores.
Tuve que reestructurar más de 120 posts de los que me servían para mi nuevo nicho, claro está.
Fue una tarea infinita y al mismo tiempo, motivadora; porque al ir arreglando con palabras claves y demás, las visitas al blog han ido aumentando y eso quiere decir que estoy haciendo todo bien.
Por ello es que te insisto tanto en que pienses:
¿Qué es lo que quieres alcanzar con tu blog de escritor? ¿A quién quieres dirigirte con él?
Tómate tu tiempo y analiza bien eso para que después pienses qué tipo de contenido podrías generar porque tiene que ser atractivo para tus lectores y para Google que es quien va a ayudarte a posicionarte según vayas creciendo y haciendo las cosas como a él le gusta: bien.
También ten en cuenta que para que un blog atraiga al público que deseas, tienes que ser constante escribiendo.
La clave está en la constancia y en generar buen contenido dirigido a ese público.
Si decides lanzarte por lanzarte, abrir un blog porque «sí»; gastar tiempo y energía al menos cada semana en crear contenido que te aleje de tu objetivo real, vas a quemarte; y cuando tu parte creativa se quema, sufren hasta tus libros porque la desmotivación va a dominarte.
Evita todo esto haciéndote las preguntas adecuadas y teniendo la organización necesaria para alcanzar todos tus objetivos.
¿Tienes un blog de escritor?
¿A quién va dirigido y qué tipo de temas públicas en él?
Te leo en los comentarios.
¡Gracias por leer, opinar y compartir este post!
¡Hasta la próxima!
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