Hola queridos lectores, en esta oportunidad sigo con las preguntas a escritores, Diana C. Acosta nos muestra un poquito más de sus experiencias como escritora.
Diana C. Acosta, es una amiga muy talentosa. Espero que se den la oportunidad de conocerla un poquito más, y de que busquen leer sus libros.
Escritora entrevistada: Diana C. Acosta
Entrevista realizada por: Kassfinol
#1 ¿Qué género literario escribes y cuál otro te gustaría escribir?
Ante todo, GRACIAS por permitirme estar acá.
Mi escritura se desarrolla en el género Romántico – Erótico, es el estilo en el cual me he desenvuelto siempre y ME FASCINA. Pero también me encantaría escribir fantasía. Lo intenté, pero nada demasiado profundo hasta ahora. También sería genial desarrollar una novela de época, tiempos muy lejanos, algo extra de antiguo. Sería fantástico. Sé que algún día lo haré.
#2 ¿Qué piensa tu familia sobre el oficio de la escritura? En el caso de no saber, dime, ¿Por qué tu familia no sabe que escribes?
Actualmente, mi familia no es tan grande: mi madre y yo. Por lo tanto, ELLA LO SABE, no ha leído mis escritos pero me apoya en todo. Sin embargo, la veo dudar, no cree siquiera que haya escrito todo lo que he sacado hasta ahora (risas).
El resto de pocos familiares por aquí y por allá saben también que escribo y suelo recibir felicitaciones de ellos; dicen que es toda una proeza por mi parte, de hecho. Creo que no me felicitan efusivamente porque esperan verme tocar las estrellas más altas y eso es bueno.
#3 ¿Por qué decidiste escribir con seudónimo y de no tenerlo, por qué te inclinaste a publicar con tu nombre real?
Realmente nunca pensé cambiar mi nombre al momento de publicar. Solo fluí, me dejé ver así y aquí estoy.
#4 ¿Qué es lo que más detestas o te incómoda del proceso de publicar un libro?
Creo que mi mayor molestia al publicar, sucede cuando el Internet no me colabora para hacer y deshacer todo lo que quiera en el proceso. Me he hecho esa pregunta y me he dado cuenta que hasta ahora nada del proceso como tal me incomoda o me da rabia. ¡Ya hablo muy en serio! Lo único sucede cuando se me ralentizan las cosas por inconvenientes referidos al Internet o la luz. Allí, cuando eso pasa, en ocasiones me convierto en una gata rabiosa, o en una asesina en serie (risas).
#5 ¿Cuánto fue el tiempo máximo que te tardaste escribiendo un libro? ¿Dime el por qué?
UN AÑO sin detenerme. Es decir, sin abandonarlo para luego retomarlo o algo por el estilo. Y me tardé ese tiempo por los problemas de energía eléctrica que suceden desde hace tiempo en mi país. El proceso de escritura e investigación se hizo demasiado lento.
#6 ¿Qué piensas sobre el comportamiento de los escritores? Ya sabes: El ego, el autobombo, la falta de compañerismo y demás. Luego me dices: ¿Qué haces tú para que eso en el mundo literario cambie?
No suelo opinar mucho al respecto, sin embargo cuando lo hago, no solo me enfoco en los escritores, sino en cualquier profesional que alcance un logro significativo.
El ego es malo, es negativo, en cualquier momento dañará, por muy bueno que sea la persona en sus artes.
Ahora, hablando específicamente de escritores que (como dicen algunas personas) se la creen de mucho, pienso que así no van a conseguir nada más allá de una publicación tácita o de promociones normales. Es muy difícil lograr grandes cosas estirando el cuello y arrugando los labios desarrollando una carencia de compañerismo.
ADORO aquellos consagrados que siguen siendo sencillos, cálidos con la gente, amables o simplemente: normales; tanto con sus lectores como con sus colegas. De hecho, me fascina seguirles la pista, leer sus comentarios y publicaciones; es algo gustoso de ver.
La “fama” no puede convertirnos en arrogantes, eso está mal. La fama así, es efímera: logros que a la larga se convierten en plástico.
Y bueno, ¿qué hago para que eso cambie en el mundo literario? Estar conectada con mis lectores. El FeedBack, la conversación con mis colegas, el apoyo para que sigan creciendo y alcanzando logros… La interacción con mis lectores y leer sus opiniones, prestarles atención, ¡hasta saludarles! Es una manera de equilibrar la balanza porque, así como ellos me ven como una escritora genial o como sea, yo soy lectora también. Soy una más de ellos y siempre lo seré porque ¡me encanta leer! Y espero que siga siendo así.
#7 ¿Crees que puedas llegar a vivir solo de la escritura?
Sí, si lo creo. Es lo que más deseo en este mundo. Y no hablo de llegar a “enriquecerme”. Sino simplemente Vivir de Escribir: el cenit de la vida, la mayor satisfacción. Leer, publicar, escribir, desarrollar y con eso subsistir… ¿Habrá algo mejor?
#8 ¿Qué es lo más hermoso que te ha dejado el mundo literario?
El leer libros gratis y que aún no han salido a la venta cuando los recibo, porque los propios autores me los regalan para que yo los reseñe o les dé el visto bueno…
(Internamente, le acabo de prender fuego a una guitarra a lo Jimi Hendrix).
Naahh… Bromeo, eso no es lo más hermoso. La verdad es que es TODO, pero mayormente: las amistades que he ganado en este mundo. ¡Nada como eso!
#9 ¿Puedes escuchar a tus personajes? ¿Qué relación terminas teniendo con tus personajes?
Mis personajes son mis Panas, mis Cuates, mis amigos. ¡Claro que los escucho! Buenos, malos, antagonistas, protagonistas, extras… Los escucho, los obedezco creándoles vida en mi cabeza, les imagino escenas aledañas cuando vuelvo a leerles y cada vez los comprendo más.
Esto es interesante. Puede que en otro momento de mi vida deje de opinar así o este efecto se transforme. Pero por ahora, sí, los escucho. Y mi relación con ellos es estrecha.
#10 ¿Cuántos libros crees publicar en lo que te resta de vida?
No tengo ni la menor idea. Y no quiero tenerla. Solo quiero escribir hasta el infinito y más allá.
#11 ¿Cuál es la mejor experiencia que has tenido hasta el momento con un lector(a)?
El que una lectora consiguiera mi número de teléfono y me metiera en el grupo de Whatsaap que ella misma creó sobre la novela EL LABERINTO DE ARAGÓN, para hablar específicamente de la trama y nada más.
Quedé… Dios Santo del Cielo.
Entré, conversé, respondí preguntas, vi las imágenes que los miembros buscaron en internet en referencia a la historia, me reí circunstancialmente después de echar la lloradita por la emoción, y me quedé detrás de las ramas siendo testigo de las locuras, risas y… ¡Fue demasiado emocionante!
Por allí queda el grupo. Fue parte de un pequeño boom, ya la cosa se ha calmado, pero ahí está creado. Creo que en cualquier momento muevo las aguas a ver si se levantan de nuevo las mareas.
#12 ¿Cuál ha sido hasta el momento la peor experiencia que tuviste con un lector (a)?
Cuando en Amazon, alguien perverso colocó en la casilla de opiniones de una de mis novelas, el final de ella.
Puso: “Esta novela no es para mí. Y al final…” Tal, tal, y tal.
¡Contó todo! ¿Lo matamos, verdad? Yo creo que sí.
Porque hasta el sol de hoy no he comprendido qué dioses o rayos motivó a esa persona a colocar EL FINAL de la novela allí.
En ocasiones los lectores obran de maneras misteriosas, y lo peor es que me colocó UNA ESTRELLA. Sin embargo, la estrella no fue la mala experiencia, como claramente se puede notar. (Risas).
#13 ¿Dónde sientes que fallas como escritora?
¡Diablos! Me van a odiar, pero es en el proceso; más allá del contenido que desarrolle o las técnicas que use en la redacción. Mis fallas son personales, atadas al proceso de escritura. Y las siento crudas cuando mezclo el vicio con aquello, porque la ansiedad que me provoca lo que escribo es TAN ALTA, que en ocasiones no sé cómo manejarla.
Suelo entonces fumar y beber café al terminar un capítulo pensando en lo que hice, recordando, imaginando lo que viene, investigando, leyendo lo que acabo de desarrollar, así y así… hasta que me veo atrapada en una vorágine creada por los humos y los café a niveles de nerviosismo y locura.
Sé que eso no está bien, es mi gran falla como escritora. De hecho, es el primer consejo que Stephen King propone a los escritores (y yo vengo a romperlo):
“Nunca ates un vicio con la escritura. Luego, no lograrás escribir sin ellos”.
Qué de cierto es eso. Pero claro, conozco ese fallo, lo retuerzo y ahí me voy bandeando.
#14 ¿Tienes algún ritual o manía para escribir?
No lo creo. Puedo escribir en la PC, en la laptop, en el celular, a mano… Eso para las manías. El ritual sí lo tengo y a veces si no lo cumplo así, siento como un cortocircuito en el cerebro: levantarme bien temprano, estar en soledad absoluta, prepararme una JARRA de café, sentarme en el patio (en Mí Rincón) y empezar. Bien sea a escribir como tal, o a pensar en lo que rayos escribiré. O a investigar, eso va dentro del proceso.
De hecho, a veces pienso y pienso y no escribo nada. Pero ya ahí estoy haciendo algo al respecto porque simplemente es así como me gusta hacerlo en la mayoría de los casos. Casi rutinario… Bueno, no, casi no, ¡esa es mi rutina! Es más: creo que al final si es una manía tal cual, ¿a quién quiero engañar?
#15 ¿Te comparas con algún escritor? ¿Por qué? ¿De qué forma?
Wow… Creo que jamás me he comparado con ningún escritor. Lo juro, jamás había pensado en esto. Es más, ni siquiera me he sentido identificada con ninguno.
Como reseñista sí, de hecho lo digo: mi manera de reseñar se parece mucho a la de un blog que me FASCINA que se llama Natasha is a Book Junkie. Pareciera que ella fuese la versión en inglés de mí.
Cuando comencé a leer sus reseñas, me sentí identificada de inmediato porque ambas exponemos esa energía en nuestras opiniones, que tal parece que las dos reseñamos justo después de terminar de leer. Esa emoción la conozco tan bien que la leo a ella y me huele a leguas que acaba de terminar de leer lo que reseña.
Allí sí me vi comparándome. Pero como escritora, con otro colega, no, jamás. ¿Será extraño eso? ¿Malo, tal vez? No lo sé. Puede que en algún momento de mi vida la cosa sea distinta.
#16 ¿Sientes devoción- admiración- idolatría por algún escritor?
Por supuestísimo que sí y son DOS: Sylvain Reynard de Canadá y Malenka Ramos de España. Ambos talentos con intensidad rivalizada. Esas dos personas son… Leerlas ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida.Y luego conocerlas, interactuar, vaya…
Sylvain me dio una vez un regalo personal y ese día pensé que me daría un ictus, un very-very, un vahído. Y el día que vi que Malenka me siguió en Twitter, creo que lloré. (Risas locas).
#17 ¿Cuál es ese género literario que nunca ha llamado tu atención o que jamás leerías o escribirías?
Hasta ahora no he repudiado ninguno. Leo todo lo que caiga en mis manos. Por lo tanto, no puedo decir que jamás escribiría tal género. No me atrevo a decir eso, al menos por ahora.
#18 ¿Qué es lo peor que te ha pasado escribiendo un libro?
Que se me borrara un súper adelanto de una de mis novelas por un fallo de mi computadora.
#19 ¿Qué es lo que te motiva a escribir?
La necesidad de crear historias o tramas que me encantan leer. Lo que escribo nace de mis grandísimos gustos en la lectura. Es decir, lo que escribo es lo que me gusta leer. Y esa es mi motivación, me agarro de esa cuerda y no me suelto. Me encanta hacerlo y me impulsa a más. Me lleva lejos.
#20 ¿Cuál es el lugar más incómodo en el que te ha tocado escribir? Cuéntanos lo qué ocurrió o por qué ocurrió.
En la oficina.
Escribí la bilogía ZÁCARI casi al completo en la oficina, en medio de mucho trabajo. ¿Cómo lo hice? No lo sé, pero lo hice. Y era demasiado incómodo y estresante.
Hubo momentos en los que abría la pantalla de mi trabajo cuando uno de los jefes se sentaba a mi lado, y en los instantes que aquel no miraba la pantalla, abría rápido el escrito Y OBVIO QUE NO LOGRABA TIPEAR NADA EN ESE MOMENTO pero el proceso seguía porque releía lo que acaba de escribir a escondidas. Y todo eso pasó porque en ese entonces trabajaba 24/7. No tuve de otra, ¡no tenía espacio en la vida! Y quería mucho lanzar esa novela.
Ya luego relajé la pelvis en un domingo que se suponía debía descansar y no lo hice, y allí amanecí hasta terminarla
#21 ¿Qué haces o cómo te sientes al recibir una reseña negativa justificada?
La leo muchas veces, no digo nada, solo la leo. Pienso y la leo otra vez. Trato de entender a la persona, siento el impacto (si es que lo hay), comprendo su opinión, trago grueso y la vuelvo a leer.
Luego se la envío a mi equipo de los consuelos, conversamos al respecto, me tomo un café y sigo con mi vida.
#22 ¿Qué haces o cómo te sientes al recibir una reseña destructiva, ya sabes esa que hacen los subnormales trolls?
La termino de leer y justito allí ya estoy lanzándola en el grupo de los consuelos: y la comento así como hablaría sobre algo injusto con una vecina, (ambas con rollos en la cabeza, por supuesto): desaforada, libre y subiendo el tono. Y le agrego un: ¿qué se cree para decir semejante cosa?
Gruño, además.
Luego la echo a un lado y hago como si no existiera porque si me dejo llevar, me puedo molestar cada vez más.
Cada quien tiene su opinión con respecto a un libro pero es bien sabido que hay gente que le gusta echar a perder el mundo. Odio esas críticas, las que uno lee y se termina diciendo: ¿Es en serio?
#23 ¿Cómo te imagina viviendo de tus libros? ¿Harías cambios significativos en tu vida? Menciona cuáles.
Me imagino viviendo de ellos en mi país, pero actualmente no se puede. Aunque presiento que si me mudo, regresaré para seguir cosechando aquí los frutos alcanzados fuera. Es mi meta, es un sueño. Así lo imagino. ¿Y qué cambios haría? Hay varios pero principalmente: mudarme y bajarle dos a mis manías, retorcerlas un poco más, seguir adelante y no dejar de luchar.
#24 ¿Qué es lo que más odias al leer un personaje?
Esto es muy en serio: leo y leo y termino por no odiar a ninguno porque por muy malvados que sean, me parecen que son la energía de la historia. Sin embargo, en ocasiones (muy pocas y logro recordar un sólo personaje así en este momento) me choco con personajes que no entiendo cómo es que siguen en la trama. Se me hacen tan innecesarios y peor: a veces se nota claramente que el autor o autora los adora porque los convierte en personajes “importantes”.
Bahh, importantes…
¡Importantes nada! Yo quiero que los mate. ¿Por qué siguen vivos haciendo vida por allí? Quiero que mueran y no los matan. Qué estrés, por Dios.
#25 ¿Cuál es ese mundo utópico donde te gustaría vivir?
No sé si utópico, puede que sí pero clarísimo lo tengo: me encantaría vivir (trabajando, visitando, recorriendo o hasta siendo dueña) de la librería de una novela llamada: Lazos de Familia. Es tan perfecta…
A ver.
Está ubicada en Leblón, Río de Janeiro, ¡muy cerca de la playa! El visitante puede entrar vestido de chaqueta o en traje de baño. ¡Vaya por Dios! Es amplia, ordenadísima, vanguardista y tranquila. Piso de madera y alfombras, un sitio ameno y relajado. Fresco, buena temperatura, nada molesto.
Los empleados son geniales y está dividida en áreas: te recibe a la izquierda la papelería que de seguro huele divino. En el centro la recepción con una chica súper genial y muy inteligente, conocedora de todo, bastante eficiente y tolerante. A la derecha, la venta de los libros y tienen todo tipo de géneros.
Detrás de la recepción, una amplia escalera que te lleva al piso de arriba donde están las oficinas de administración y gerencia, y donde EDITAN MANUSCRITOS. Es decir, la librería en cuestión también es una editorial. ¡Dios mío! ¿Se entiende la belleza? Pero eso no es todo.
Tiene un área de cafetería y al final, sillones para conversar pero que se presta para arrimarlos y organizar una firma de libros.
Colores cálidos en las paredes, recuerdo muy bien que predomina el marrón claro de la madera y algunos destellos de blanco y verde agua. Un horario lindo, tempranero y cerrando a buena hora de la noche, excelente atención…
Vamos, es un sitio (un mundo) el cual me fascinaría no solo conocer, sino VIVIR.
Sería tan feliz tener un sitio así… Crear en un sitio así. ¡Conocer gente en un sitio así!
No me imagino en escenarios de fantasía o en una ciudad al completo con detalles distintos al mundo real, no. Podría decir que me imagino vivir en mi país sin tanta corrupción, más utópico que eso no hay nada. Pero si pienso un poco más y ubico esa librería aquí, querrá decir que todo está bien. Así que, solo me imagino estar allí y lo demás fluye solo.
#26 ¿Cuál es ese vicio culposo al que te arrastró la escritura o lectura?
El cigarrillo. Es el único vicio que tengo, pero no me lo dio ni la escritura o la lectura. Más bien, estas dos lo han intensificado.
Y bueno, el leer propiamente ya es un vicio. Leer sin parar, no puedo parar. Necesito leer.
#27 ¿Qué cosa te gusta que a la gran mayoría no le gusta? Puede ser: Comida, libro o Música.
Creo que soy tan normal que todo lo que hago o lo que me gusta, a una gran mayoría también le gusta (risas). Si hablamos de comida, me gusta lo que a todos (no me gusta el tomate y no todos los mariscos, ódienme). Si hablamos de libros: leo de todo. ¡En serio leo de todo! De música: me gusta CUALQUIER estilo y lo digo en serio. Pero si hablamos de hacer cosas…
Hubo un tiempo que me fascinaba estar al borde del riesgo, y eso sí que a muy poca gente le gusta hacer. No sé, hacía cosas riesgosas como caminar por el centro de mi ciudad de noche, atravesar calles oscuras llenas de cualquier locura… Algo por el estilo, todo en mis tiempos de universidad. Lo hacía porque me hacía sentir viva.
Esa podría ser una de esas cosas que hacía (porque ya no lo hago) y que a casi nadie le gusta.
#28 ¿Por qué te deberían de leer a ti? ¿Cuál es tu propuesta de valor, qué tienes de diferente para el mundo o para un lector?
Con mis escritos me encanta decirle al lector:
Mira lo normal que es fallar. ¿No ves que es ley de vida? ¿Puedes notar que mis personajes son como tú? Ellos fallaron terriblemente, fueron juzgados por ellos mismos y por otros y ¿cuál es el problema? ¿Vas a morir por haber fallado tú también? ¿Quién te impide levantarte después de una debacle?
Por eso escribo sobre sentimientos magnificados, sobre errores garrafales e imperdonables, sobre miedos que bien podrían apaciguarse pero las propias mentes o la paranoia personal no deja que así sea. Si es sobre sexo, escribo lo que a todo el mundo le gustaría que le hicieran, porque mientras sigamos siendo humanos así será eternamente. Y que mientras se excitan, aprendan que por ahí, uno se puede conocer y a niveles increíbles.
Si escribo sobre amor, me fascina enseñarle al lector que existen los amores fuertes, rudos, de esos que te cambian la psiquis… Eso, me gusta, cambiarle la psiquis al lector. Que dude, que se pregunte cosas, que sus límites y los “¿yo me comportaría así?” entren en tela de juicio. Porque allí está la esencia de todo, la merma de la vida.
Entonces, mis escritos tienen todo eso más la amistad, la familia y lo importante que es introducirla en la tramas. A partir de esa mezcla nacen los valores, nace la enseñanza, y por allí voy dejando rastros de un camino quizás nuevo, quizás más claro, que el lector luego de terminar de leerme, pueda justo empezar a recorrer.
Mi slogan es:
“Sé que te pareces a mí. Sé que te gusta el fuerte, fuerte amor”
Y es por ello. Y explico así que es simplemente eso lo que puedo ofrecer y hasta ahora. Ya que mientras siga viva seguiré aprendiendo. Y mientras aprendo, espero seguir evolucionando; poco a poco o de tajo. Cambiar.
Vamos, lo normal. Porque claro, no sé si mañana querré hacer lo mismo que ahora, o pensaré de este modo. Aunque yo creo que sí porque me la he pasado tan bien escribiendo así…
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